En esta ocasión es el Comité Olímpico Italiano (CONI) quien se quiere marcar un tanto en la hipócrita lucha contra el dopaje. El ciclista italiano del Movistar, Giovanni Visconti, es sancionado con tres meses de suspensión por sus relaciones con el doctor Ferrari en el año 2009. Efectivamente, otro ciclista sin dar positivo en ningún control ve como su nombre es manchado con la tinta de las plumas de los organismos que presumen de luchar contra el dopping, y lo que realmente están manifestando es su cuestionable sistema de control de sustancias prohibidas.
Sin duda, nuestro deporte no es 100% limpio, como no lo es ninguno, pero a diferencia del resto, el ciclismo se enfrenta cada día a lavar la cara con las gélidas aguas que emanan de la UCI, AMA y Comités Olímpicos. El ciclismo es el deporte más controlado, pero estos estamentos no se conforman con los resultados negativos de las pruebas y acusan y juzgan en tiempos inaceptables a deportistas. El ventilador lo tienen en marcha y salpica casi a diario el nombre y la reputación de este bello deporte.
¿Ustedes se imaginan ser sancionados por haber comprado un coche de lujo en 2009 en una importadora de vehículos que utilizaba ese negocio para el blanqueo de dinero? Quizás usted no pagó el IVA, o quizás sí, pero que más dá. Usted será sancionado por haber comprado el coche a unos estafadores. ¿Entienden algo?
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